Vivimos en el refugio todo el año. Sabemos lo que significa vivir tan alto en las montañas. Y también sabemos que con una gran vista puede venir el frío y el viento helado.

Así que no nos gusta el frío ni el viento helado. Por eso, en temporada baja, nuestra chimenea está encendida casi todo el tiempo. Preferimos acogedor. Por eso tenemos muchas mantas y almohadas calientes.

Si desea una manta o almohada adicional, informe al personal del refugio. Tenemos mucho que compartir.